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Acabamos el año 2021 con una noticia que nos llena de orgullo y satisfacción, y es que cerramos lo que llevamos de período de pandemia sin un solo lanzamiento por impago de alquiler. Conseguir este resultado no ha sido fácil porque muchos inquilinos han vivido situaciones muy difíciles, sobre todo durante 2020.
En la primavera y verano de 2020 fueron numerosos los retrasos en los pagos, inquilinos en ERTE que además cobraban tarde… Tuvimos que hacer un trabajo tremendo esos meses para gestionar individualmente cada retraso en los pagos de la renta, para hablar con cada propietario e inquilino, informarnos e informar de los cambios normativos y ayudas que salían, e incluso ayudar a algunos inquilinos con las solicitudes telémáticas de ayudas para el pago de la renta. La actitud de los arrendadores también es de agradecer, porque todos los que han sufrido retrasos en los cobros de la renta han sido flexibles y en todos los casos encontramos soluciones como aplazamientos en los pagos o reducciones temporales de la renta en algunos casos.
El volumen de trabajo que generó esto fue de tal dimensión que incluso tuvimos que adaptar el software para poder gestionar toda la información que se generaba en estas gestiones, automatizar la redacción de acuerdos, gestionar las firmas telemáticas… Todo el esfuerzo inicial, además, lo hicimos en un período en el que no generábamos ingresos, puesto que al estar confinados no podíamos hacer visitas a los inmuebles y no había operaciones de venta ni de alquiler.
Pero viendo hoy con perspectiva todo ese trabajo que realizamos podemos estar muy satisfechos porque no ha habido un solo lanzamiento en un momento en el que la morosidad de alquiler se ha disparado. Así que una vez más se demuestra que la gestión integral del alquiler, planteada como estrategia preventiva no solo para defender al propietario sino para buscar el bien de ambas partes, reduce los clásicos problemas del arrendamiento.
Aumentan los impagos de alquiler durante la pandemia
La satisfacción por el resultado de nuestro esfuerzo es aún mayor cuando vemos que en el entorno ha ocurrido lo contrario. A poco que se busque en internet información sobre datos de impagos de alquiler durante la pandemia se podrá encontrar numerosas noticias que hablan del incremento en los impagos durante este año y medio. Una de las noticias más recientes, de hace un mes, situaba este incremento de los impagos en nada menos que un 66%. Ojo con esto, porque como decimos frecuentemente, muchas de estas notas de prensa no parten de estudios científicos ni de datos reales o significativos y en ocasiones tienen como objetivo influir en la opinión pública y en último término incluso animar a contratar ciertos servicios. Hay incluso quien sitúa el incremento de la morosidad de alquiler en el 380%.
La morosidad en el alquiler de vivienda antes del COVID
Realmente no hay datos fiables de porcentaje de morosidad en el alquiler de vivienda habitual. Por una parte tenemos los datos del INE sobre litigios en arrendamientos urbanos, pero nos falta un dato fiable de número de contratos de alquiler en vigor para poder saber qué porcentaje de estos contratos termina en desahucio por impago. Hablo ahora de memoria pero en algún momento hace uno o dos años leí una noticia que hablaba del 8% de impago de alquiler. En los inicios de la pandemia los grandes propietarios hablaban de tasas del 15%, mientras que otros situaban esta tasa en el 5,9% a finales de 2020.
Si estás pensando en alquilar tu vivienda con tranquilidad y seguridad, pregúntanos sobre nuestro servicio de gestión integral de alquiler con garantías.
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