En esta inmobiliaria no somos muy de rezar, al menos quien esto está escribiendo. Así que te puedes imaginar la sorpresa que me llevé cuando vi, hace ya unos meses, que había gente que encontraba la web de Etikalia buscando en google cosas como “oración para vender un piso”, “oración para vender una casa” o cosas incluso más sorprendentes como “ritual para vender una casa”. Que yo no se si lo que buscaban era un rito vudú, o qué.
Si eres creyente no critico que quieras tener a tu dios/a como aliado/a en la venta de tu piso y que quieras buscar una oración para vender un piso. Aunque con los problemas que hay en el mundo, entre ellos una guerra en Europa, debería estar más centrado (o centrada) en resolver esos problemas que en que te saques un par de miles de euros más en la venta de tu casa. Pero bueno, si esa creencia te ayuda de alguna manera, está bien. Por otra parte no me consta que haya un texto canónico específico para vender una casa. Así que puedes rezar lo que sepas, no busques una oración inventada por vete a saber quién.
Aparte de los rezos, aquí tenemos un refrán muy popular que se aplica perfectamente a esta situación: “A Dios rogando y con el mazo dando”. Es decir, que solo rezando no te garantizas la venta de tu piso, hay que hacer algo más.
Lo que te sugerimos es que para dar con el mazo contrates un buen servicio de venta de viviendas. Si cuando tienes una enfermedad rezas y vas al médico (por si acaso solo rezando no te curas), ya sabes de qué te estoy hablando. Ten en cuenta también que, así como hay curaciones milagrosas “documentadas” no se conocen milagros en el sector inmobiliario. Así que si consiguieras vender tu piso solo rezando sería la primera vez en la historia de la Humanidad que se produce un milagro inmobiliario.
Por lo tanto, permiteme que insista. Contrata a una buena agencia que te ofrezca un buen servicio de venta de vivienda. Si no sabes cómo hacerlo, aquí te dejo algunos consejos para elegir una buena inmobiliaria para vender tu piso.
¿Vas a vender tu piso?
Imagen de Gerd Altmann en Pixabay
